lunes, 4 de abril de 2011

LA PERSONALIDAD EN LA VIA DE CRECIMIENTO

¿Cómo comienza el cambio?

Para cambiar, hay que al menos intuir que existe una realidad diferente a la que creíamos. Como ya comentaba en el anterior Post, que somos entidades espirituales infinitas, no finitas, pero en cada existencia sometida a las reglas de la naturaleza material. A estas reglas de condicionamiento material se les denomina en el Veda como gunas, siendo de tres tipos: sattva, rajas y tamas; es decir, condicionamiento bondadoso, condicionamiento de la pasión y el condicionamiento de la ignorancia.

Cualquier acción, en el mundo material, está relacionada directamente con el condicionamiento anterior respecto a la acción, considerando como acción la ejecución de actos, la no acción o el propio pensamiento. Todo ello va a formar parte de la propia personalidad, el carácter, los gustos, aquello que supone una inclinación natural en nosotros.

Hay entonces quien dice, soy así, qué puedo hacer yo. Obviamente, quien dice eso y se conforma con sus acciones y las consecuencias de estas, demuestra una gran ignorancia, pues pese a que en nosotros se dan unas inclinaciones naturales, estas pueden evolucionar hacia donde deseemos que lo hagan. Es decir, hacer uso de la personalidad para el crecimiento personal y espiritual.

Así quien tiene un carácter fuerte, puede dejarse llevar por la ira, o aprender a canalizar toda esa energía para la acción positiva.

Es importante fijar en la mente la idea de que “Soy aquello que desee ser, pues puedo moldearme con la forma que yo mismo decida tener”. Este no es un trabajo fácil. Pero si controlo mi inclinación natural, tendré control sobre el objetivo al que pretendo llegar. Si controlo mi presente controlaré mi futuro.

Esa puede ser la decisión más importante de tu vida, pues podrás asumir el control de tu vida y crecer a donde desees hacerlo. No existen más trabas que las que mentalmente tú te pongas.

Para ello has de descubrir los rasgos positivos y negativos de tu personalidad, y ser conscientes que los rasgos que consideras negativos, no son más que una mala canalización, que transformada puede convertirse en energía positiva útil para tu progreso interior.

Has de saber que las dificultades no son obstáculos, sino oportunidades para mejorar, y el peor de lo que consideras un defecto, puede ser, bien encauzado, un aliado para tu desarrollo. De esta manera harás uso de tu personalidad vía crecimiento.

No creas pues, que como eres de determinada forma, no puedes, sino mira la manera de hacerlo, y seguro que encontrarás el medio para trasformarte. Tienes en ti todo el potencial, pues en ti esta todo lo que necesitas para tu realización personal y espiritual, sólo tienes que redescubrirte, ser consciente de ti, ser autoconsciente de ti.

Bendiciones.

Sri Nityasevaka.